
a Policía peruana decomisó cuatro toneladas de mercurio procedentes de México que iban rumbo a Bolivia, informó este jueves la Superintendencia Nacional de Aduanas y Administración Tributaria (Sunat), que aseguró que el operativo supone un golpe a las organizaciones criminales vinculadas a la minería ilegal de oro.
El mercurio, utilizado para separar los metales preciosos de sedimentos, estaba adherido a 20 toneladas de piedra molida localizadas dentro de un contenedor en el puerto del Callao, vecino a Lima.
Este metal es altamente tóxico por lo que su uso en la minería artesanal ilegal contamina el aire, agua y suelos. La información se dio a conocer este jueves, pero el decomiso se realizó el 15 de junio, según Sunat.
El cargamento fue detectado mediante “el uso de equipos tecnológicos especializados y análisis de laboratorio. Ello permitió corroborar que la piedra chancada (molida) había sido impregnada con mercurio”, señaló Sunat en un comunicado en las redes sociales.
“Este hallazgo representa uno de los golpes más fuertes que se han dado en la lucha frontal contra la minería ilegal”, aseguró Jorge Gallo, Intendente Nacional de Control Aduanero, citado por la institución.
Se estima que el embarque, luego de ser procesado, podría rendir aproximadamente 4 toneladas de mercurio. La mercancía está valorizada en más de medio millón de dólares.
La incautación permitió identificar a una presunta red internacional de tráfico ilícito de mercurio que opera en México, Perú, Colombia y Bolivia, acotó la autoridad peruana.
Según un informe divulgado este jueves por la organización Agencia de Investigación Ambiental (EIA por sus siglas en inglés), si el cargamento hubiera llegado a su destino —minas de oro artesanales y de pequeña escala en zonas remotas de Colombia, Bolivia y Perú— podría haber permitido la extracción de aproximadamente 1,6 toneladas de oro ilegal, valoradas en 168 millones de dólares.