Un subteniente de Policía, a quien autoridades de esa institución y de la Fiscalía de Cochabamba se niegan a identificar, admitió que estuvo armado en el operativo de desbloqueo en Cotapachi, pese a que está prohibido, y que disparó contra los comunarios movilizados, de los cuales dos murieron con balazos en el tórax y otros 10 resultaron heridos.
“Existe un oficial de Policía, en el grado de subteniente, que en base a ya la declaración, habría utilizado su arma de fuego en una situación donde la necesidad le obligaba a hacer ese tipo de actividades”, indicó el Inspector de la Policía, general Gunther Agudo.
Sin embargo, el propio Agudo sostuvo que según los reglamentos policiales, los efectivos están prohibidos de portar armas de fuego cuando se trata de operativos de desbloqueo o de movilizaciones callejeras protagonizados por civiles dentro del territorio nacional.
Según autoridades policiales y del Ministerio Público, el oficial habría resultado herido en una “emboscada” de los manifestantes en cercanías del botadero de Cotapachi, este lunes, y decidió utilizar su arma de reglamento, violando los reglamentos internos.
Según la Fiscalía, el subteniente tenía en su cuerpo 18 esquirlas producto del disparo de una escopeta. Estaba afectado, en la cadera, miembros inferiores, parte lateral del cuerpo y la nariz.
“Ha sido intervenido quirúrgicamente y ya ha estado en condiciones de declarar. Y es el día de hoy que ha prestado su declaración informativa”, dijo el fiscal departamental de Cochabamba, Osvaldo Tejerina.
El fiscal señaló que dentro del proceso penal se valorará si el policía actuó en defensa propia. Por lo pronto, anunció que será imputado por homicidio y puesto ante un juez.
Agudo enfatizó que está prohibido para los policías estar armados en este tipo de operativos, por lo cual el subteniente debe enfrentar a Ministerio Público y un
Los hechos se registraron el lunes cuando la Policía había desbloqueado el ingreso al relleno sanitario de Colcapirhua, cuyo ingreso estaba bloqueado por habitantes de Cotapachi en el marco de una disputa limítrofe.
El general Agudo indicó que, luego del operativo, se generó una “emboscada o planificada” de corte criminal, puesto que se usó dinamita contra los efectivos.
Aseveró que la Policía hizo uso de agentes químicos, pero lamentó que siete efectivos resultaron heridos. Dijo que fueron víctimas de torturas y hostigamiento.
