
a Policía Bolivia es un verdadero revoltijo. Hoy fueron posesionados generales recientemente ascendidos como comandantes departamentales de la Policía en regiones más pequeñas, mientras que al polémico coronel Erick Holguín no le dieron la codiciada estrella dorada, pero sigue al mando de Santa Cruz, el departamento más importante del país.
En el acto de posesión de los generales, que ahora son varios y ocupan los principales cargos a nivel nacional y comandancias departamentales, el presidente Luis Arce lamentó públicamente que algunos senadores hayan marginado a Holguín del ascenso al grado de general primero en la Policía Boliviana.

"Estos intereses políticos, mezquinos, cálculos electorales, no vienen bien a la patria ni al reconocimiento a la gente que aporta con su trabajo y con su profesionalismo", dijo Arce luego de afirmar que Holguín posee un "intachable trayectoria" en la institución del orden,
Holguín agredió frente a las cámaras de televisión, hace unos meses, al excapitán de Policía, ahora político de oposición, en una dependencia policial de Santa Cruz y fue acusado por el jefe del MAS, Evo Morales, de ser parte de un supuesto "plan negro" para desprestigiarlo y atentar contra su vida.
En el acto de posesión de nuevas autoridades de la Policía, el maestro de ceremonias mencionó el nombre del coronel Erick Holguín Donaire como comandante interino en el departamento de Santa Cruz, cargo que ostenta desde el pasado.
El alto mando de la Policía fue ratificado en los cargos clave como Álvaro Álvarez, general ascendido de nivel. Álvarez sigue siendo Comandante General de la institución sometida al poder político.