rregular, ilegal y unilateral. Así calificó el fiscal general, Róger Mariaca, la entrega de Marcos Roberto Almeida, alias Tuta, cabecilla de la temible organización criminal brasileña PCC, ya que se la realizó sin que exista una orden judicial y no fue informada oficialmente al Ministerio Público.
“Sin conocimiento del Ministerio Público y sin orden judicial, este hombre (Tura), estando imputado e investigado (en Bolivia), se determina que sea llevado a Brasil”, protestó Mariaca.
Luego de informarse sobre la captura del cabecilla del Primer Comando de la Capital en una oficina del Segip en la ciudad de Santa Cruz, cuando pretendía obtener una cédula de identidad con nombre y apellidos falsos, aprovechando la protección de un mayor de Policía, al día siguiente fue entregado en la frontera a la Policía Federal brasileña.
El fiscal señaló que existe un procedimiento que debe ser cumplido para efectuar el traslado de personas requeridas por otros países.
Otro aspecto que cuestionó Mariaca es que, si bien el proceso por el que se investiga al brasileño Almeida es por falsedad de documentación, se trataba de indagar otros delitos en los que pudo estar inmiscuido.
“Hay más personas inmiscuidas, queríamos saber qué otros antecedentes y otras denuncias se podían investigar con este señor en Bolivia”, sostuvbo Mariaca.
Además, el fiscal general alertó que la defensa técnica del brasileño puede aprovechar que no se cumplieron las normas en Bolivia como argucia legal.
