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E

l contexto fue la posesión de los tres viceministros de la cartera de Gobierno. Ernesto Justiniano, conocido como Zar antidrogas de Bolivia, volvió este martes al despacho de Defensa Social, después de más de dos décadas.

Justiniano, ingeniero cruceño y director de un medio de comunicación digital desde hace bastante tiempo, ejerció como Zar antidrogas en el último gobierno de Gonzalo Sánchez de Lozada, entre 2002 y 2003.

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“Vuelvo al servicio público con la serenidad que dan los años para construir soluciones realistas, transparentes y sin ideologías en la lucha contra las drogas”, dijo Justiniano.

Anunció que impulsará la cooperación internacional inteligente, basada en el respeto mutuo y los resultados concretos. Apostó a soluciones con tecnología y desarrollo alternativo, teniendo al productor legal como aliado.

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Justiniano, quien tiene en su trayectoria política haber sido candidato a alcalde y diputado por el departamento de Santa Cruz, tendrá entre sus principales tareas la interdicción eficiente contra el narcotráfico, reducción de hoja de coca excedentaria y la reestructuración de la fuerza antidrogas, penetradas por las mafias narco.

En el caso del viceministerio de Régimen Interior, el ministro de Gobierno, Marco Antonio Oviedo, posesionó al abogado Jorge García Pinto, quien sustituye al locuaz Johnny Aguilera,

El tercer viceministro en jurar este martes fue el coronel del servicio pasivo Rolando Montaño como encargado de Seguridad Ciudadana. En 2018, Montaño se desempeñó comandante departamental de Cochabamba y ahora es viceministro de Seguridad Ciudadana.