
uego de varios meses en los escritorios de la Fiscalía de Tarija, la máxima autoridad de esa repartición, Sandra Gutiérrez, informó sobre la imputación formal de Evo Morales por trata de personas en el caso de Cindy Sarahí Vargas Pozo y luego comunicó que fue removida de su cargo, aunque no dio mayores explicaciones.
Dijo que el Ministerio Publico tarijeño emitió la resolución de acusación formal en contra de Evo Morales e Idelsa Pozo, madre de la víctima, por el delito de trata de personas con agravante. Se espera que ahora un juez defina la fecha y hora del juicio oral y contradictorio.

La resolución fue emitida luego de un análisis y valoración “minuciosa” que se hizo a todas las pruebas, informes y testimonios recogidos en el cuaderno de investigaciones, informó la fiscal departamental de Tarija, luego de meses de que el caso se mantuviera inactivo.
“Nosotros, como Ministerio Público, de manera muy minuciosa y luego de haber analizado toda la prueba que se encuentra en más de 18 cuerpos, se ha presentado ya la acusación formal contra esas dos personas”, sostuvo Gutiérrez.

Luego, consultada por los periodistas de Tarija, confirmó que este martes en la mañana recibió un memorándum de agradecimiento de funciones en el máximo cargo de la Fiscalía Departamental, en el que se mantuvo por más de cuatro años.
Gutiérrez, exministra de Justicia en el régimen de Morales, estuvo al frente del caso que inicialmente se presentó como de presunto estupro ya que Morales entabló una relación con Vargas cuando él tenía 57 años y la víctima 15, relación de la que nació una niña que ahora bordea los 10 años.
Cindy Sarahí, su hija y su madre consiguieron refugio en Argentina y aún no se conoce si participarán en el juicio que debe activarse luego de la imputación formal presentada por la ahora exfiscal Gutiérrez, cuyo primer paso es la convocatoria a una audiencia de medidas cautelares para Morales, atrincherado en el trópico cochabambino desde hace un año.